Cultura contemporánea y ruralidad

La pared de Limitaciones

“En el verano de 2009, oí decir a un supuesto ´enterado´ que ´existía una pared en la parte meridional de Urbasa cuya antigüedad se ignoraba´. Se refería a la Pared de Limitaciones y lo decía con mucho misterio, como quien habla de la Gran Muralla China.
Es evidente que el ´enterado´ ignoraba la antigüedad de la Pared. Y pudiera ocurrir que, a no tardar mucho, alguien le ponga algún nombre y origen fantásticos, y acabe perdiéndose el conocimiento de su verdadero origen.
Este es un intento para evitarlo y un resumen de una parte de la información recopilada.
(…)
Durante siglos, la muga entre ´lo que es de los amescoanos y lo que es del rey´, así se dice hasta no hace mucho, está marcada por los mugarris o mojones. Así, los mojones llevan grabada una L en la cara que mira hacia Limitaciones, y una F en la cara que mira al lado contrario, ´lo del rey´. (…) El ganado no entiende de mugas y las personas, cuando quieren, también las ignoran
(…)
El tema de una posible pared es tratado en innumerables ocasiones y finalmente, rondando ya la mitad del siblo XX, la Junta de Limitaciones adopta una decisión al respecto. Se trata de levantar una pared que separe físicamente su monte común y de propiedad, uso y disfrute privativos, del resto de montes y faceros mugantes. La divisoria mayoritaria es con ´lo del rey´ por toda la periferia septentrional y con la Parzonería de Entzia, po el lado poniente.
Las condiciones formuladas por la Junta para la construcción de 25 kilómetros de pared para cierre de dicho monte en su linde con el monte Urbasa, son publicadas el 7 de octubre de 1974
(…)
´Se saca a concurso la construcción en un solo trazo de unos 25km de pared seca, o sea, la longitud que falta construir para el cierre completo del expresado Monte, en su linde con el Monte del estado ´Urbasa´, de 1,40 metros de alto, por 0,60 metros de ancho, con una albardilla de césped encima
(…)

  • 20 cargas de leña aprovechadas 600 pesetas
  • 6 barrenos a 90 pesetas 540
  • 12 picos a 33 pesetas 396
  • 2 llaves a 25 pesetas 50
  • 2 almadenas a 96 pesetas 192
  • 5 ´´ 80 pesetas 400
  • 3 ´´ 72 pesetas 216
  • 4 barras a 243 pesetas 972
  • 4 ´´ a 162 pesetas 648
  • 1 ´´ a 243 pesetas 243
  • 4 azadas a 38 pesetas 152
  • Total: 4.409 pesetas
    (…)
    A título de curiosidad, reproduzco a continuación las medidas de las mugas del Monte Limitaciones, según datos de la 4.ª revisión del proyecto de ordenación y estudio de regulación de usos del monte ´Limitaciones de las Améscoas´. Hacer Agroforestal S.L. – Gobierno de Navarra (2005).
    Con Álava ..…7.449 m.
    Con el resto de Urbasa ..… 16.648 m.
    Con la parte segregada de Echávarri-Eraul .…… 2.703 m.
    Con las aldayas de los lugares del valle ……. 22.199 m.
    Total …… 48.999 m.”

García de Albizu, B. (2011). La Pared de Limitaciones (I). En García de Albizu, B. Conociendo el pasado amescoano (III). (pp. 371-376). Lamiñarra

“La Pared consta de dos tramos diferenciados geográficamente.

  • El que separa las Limitaciones de Améscoa de la Parzonería de Encia y es, por tanto, muga entre los territorios de Navarra y Álava respectivamente.
  • El que separa las Limitaciones de las améscoas de ´lo del rey´, nombre que se le daba popularmente al resto de Urbasa, por ser patrimonio real.
    La finalidad perseguida en principio, es la de preservar el hayedo existente y en particular la planta joven, el chaparro, para así proteger mejor el patrimonio forestal y contribuir al mejor aprovechamiento maderero.
    (…)
    Se evita con la Pared la entrada de ganado ajeno al valle y en cuanto al aprovechamiento ganadero local, se acotan los rasos a fin de mantener dicho aprovechamiento y hacerlo compatible con el forestal.
    (…)
    La obra se inicia el 1 de enero de 1948 y se lleva a cabo en dos años, trabajando sin interrupción en los días laborables, a excepción de las jornadas perdidas por las nevadas. El ritmo de trabajo aproximado es de 60 metros lineales de pared por día.
    La referencia para su construcción es la mojonera antigua, constituida por una treintena de mojones en la muga con Álava y más de 120 en el resto. Para evitar posibles problemas y garantizar que no se invade terreno ajeno, la pared se construye detrás de los mojones, es decir, hacia la parte de adentro de Limitaciones.
    Desempeñan la función de encargados de obra los hermanos: Máximo, Germán, Gerardo, Teodoro y Moisés Elcarte. Y más tarde, el propio Luciano Elcarte.
    Se da comienzo a la construcción de la Pared a partir del raso de Ebiso. Hacia el este, se hace con peones amescoanos contrarados para la obra. De Ebiso hacia Itarandurieta primero, y luego siguiendo hacia Murube, se contrata a una cuadrilla de peones naturales de Galicia. Este segundo equipo tiene dificultades con su tramo de trabajo, porque están habituados a hacer paredes con cemento. Al ser esta una construcción seca y elaborada con materiales recogidos in situ, siempre en las proximidades de la obra, para facilitar su acarreo, las piedras son siempre de forma y tamaño irregular, lo que supone una dificultad añadida. La falta de hábito hace que el ritmo de trabajo de esta cuadrilla sea muy lento y se prescinde de ella.
    Lo dicho no supone dificultad para los locales. La disyuntiva es, o bien sacar a toda costa materiales muy próximos, con el inconveniente de que hay zonas muy pobres y resulta muy dificultosa la tarea, o bien elegir materiales mejores pero que pueden estar más distantes e igualmente, retrasar la tarea. En definitiva, que hay que construir con lo que se encuentra más cercano, mejor o peor. La falta de calidad o de adecuación de los materiales, debe compensarse con una mayor destreza en la realización de este tipo de construcciones. Una fórmula para compensar la falta de calidad de los materiales, consiste en colocar con cierta frecuencia piedras que pasan de lado a lado, incluso sobresalen notablemente en ambas caras de la pared. No se trata de hacer ´apoyos´ para facilitar el paso, sino de introducir elementos mayores que den mayor estabilidad al conjunto.
    (…)
    Trabajan un total de 50 personas, 20 de ellas de Arróniz y el resto amescoanos. A los de Arróniz los transporta Moisés Elcarte en el camión de obra. Los sube el lunes y los baja el sábado. Este camión es el único elemento a motor empleado en la obra.
    En cuanto a la organización del trabajo, una parte del personal arranca la piedra y la trocea, otros la acarrean y un tercer grupo construye la pared. Este último grupo está formado por doce hombres y trabajan seis a cada lado de la pared. Se remata ésta colocando piedas menudas entre las grandes, para relleno y asentamiento.
    (…)
    La jornada de trabajo es ´de luz a luz´, y se suspende la tarea para almuerzo, comida y merienda que tiene lugar en el mismo tajo.
    (…)
    Para acopio y transporte de alimentos se utiliza un burro de nombre Patxi. (…9 Lo vieron sin dientes y lo compraron pensando que era pollino, pero era por viejo que carecía de ellos.
    (…)
    Al amparo y protección, frente al ganado, de la Pared, se ponen en cultivo algunas piezas, de las que muy pocas sobreviven.
    No hay fotografías de la obra.
    En el transcurso de la construcción de la pared no se producen accidentes, ni hechos violentos.”

Cambra, P. y García de Eulate, M. (2011). La Pared de Limitaciones (II). En García de Albizu, B. Conociendo el pasado amescoano (III). (pp. 377-380). Lamiñarra